El Día Mundial del Sueño 2024 incorpora el tema Equidad del sueño para la salud global.
Debido a que el sueño es esencial para la salud, todos deben tener acceso a un sueño adecuado independientemente de su ubicación geográfica, estatus socioeconómico, u otras condiciones ambientales y sociales.
Las personas y las familias se ven perjudicadas por cargas innecesarias sobre su salud, y las desigualdades en la salud del sueño no hacen más que reforzar la marginación de las poblaciones de todo el mundo.
Abordar la equidad en el sueño reducirá estas disparidades en el sueño y contribuirá a mejorar la salud y el bienestar humanos en todo el mundo.
La Sociedad Mundial del Sueño está utilizando el Día Mundial del Sueño 2024 para celebrar el sueño saludable y el poder transformador que puede tener en la vida de una persona.
El sueño es un pilar fundamental de la salud, al igual que la nutrición y la
actividad física:
- El sueño ayuda a mantener la memoria y el aprendizaje.
- El sueño ayuda a eliminar los desechos del cerebro y promueve la salud del
cerebro. - El sueño apoya la salud del cerebro, y la salud del cerebro apoya el sueño.
- El sueño apoya la salud inmunológica, y la salud inmunológica apoya el sueño.
- El sueño ayuda al sistema inmunológico a eliminar bacterias y virus.
- El sueño ayuda a reciclar las células viejas y a mantener nuestro cuerpo y nuestros niveles
de energía.
La mala salud del sueño puede tener múltiples impactos significativos en la salud
humana:
- La falta de sueño se ha relacionado con la obesidad, la diabetes , la enfermedad de las arterias coronarias y la mortalidad cardiovascular .
- La falta de sueño puede disminuir la respuesta inmunitaria, creando una mayor susceptibilidad a las infecciones que reducen aún más la calidad del sueño.
- Ciertos trastornos del sueño, como la apnea obstructiva del sueño y el trastorno del comportamiento del sueño con movimientos oculares rápidos, se asocian con deterioro cognitivo, demencia, riesgo de convulsiones y mayor riesgo de accidente cerebrovascular.
- La falta de sueño puede provocar una reducción de los tiempos de reacción, un deterioro del juicio y un deterioro cognitivo similar al de la intoxicación por alcohol.
- La somnolencia puede afectar la conducción segura incluso si el conductor no se duerme.
La salud del sueño es multidimensional.
“Sueño saludable” significa más que simplemente “dormir lo suficiente”. Hay seis dimensiones que afectan a la salud del sueño y, en consecuencia, a la salud y el bienestar general.
Organizar el “sueño saludable” en distintos aspectos ofrece a los defensores de la salud del sueño mensajes más enfocados que promueven comportamientos de sueño saludables.
Las seis dimensiones de la salud del sueño son las siguientes:
- Duración: ¿Cuánto has dormido durante 24 horas?
- Eficiencia: ¿Qué tan bien te duermes y permaneces dormido?
- Horario: ¿Cuándo duermes?
- Regularidad: ¿Tienes horarios constantes de sueño y vigilia?
- Alerta: ¿Mantienes un buen enfoque y atención durante las horas de vigilia?
- Calidad: ¿Te sientes satisfecho con tu sueño?
Abordar las disparidades del sueño para mejorar la salud de las poblaciones de todo el mundo.
Las “disparidades en la salud del sueño” se definen por diferencias persistentes en una o más de las dimensiones de la salud del sueño que afectan negativamente a una población.
Los efectos de las disparidades en la salud del sueño se hacen evidentes cuando se considera el papel fundamental del sueño en la salud y el bienestar humanos.
Las causas de estas disparidades pueden ser tanto sociales (por ejemplo, estrés psicológico, tensión financiera, hambre, amenazas a la seguridad) como ambientales (por ejemplo, luz, temperatura, ruido, calidad del aire).
En este mes de marzo, te invitamos a reflexionar sobre la importancia del sueño saludable para mejorar tu salud global.